En nuestra vida hemos de seguir nuestros propios pasos, pasos que son dirigidos, interrumpidos o motivados por los diferentes seres, objetos y cosas que se nos presentan en singulares ambientes y situaciones. Estos pasos, que en su conjunto llamamos nuestro propio sendero de vida, son una de las bendiciones mas maravillosas que hemos recibido, y en definitiva, la tarea mas difícil pero gratificante obra de nuestro ser.

Este blog esta escrito para que, a través de la poesía, sirva de ejemplo, referencia, consuelo, o motivación, a aquellos que, como yo, están en ese constante vaivén de las aguas de la vida, sentimientos y emociones que nos impresionan de múltiples formas y que nos conducen a un mismo destino, conocernos a nosotros mismos y despertar nuestra conciencia como hermanos todos, hijos de Dios. JT

jueves, 15 de agosto de 2019

HACIA MI DESTINO, LA VIDA.

Detenido a un lado del camino,
preparándome antes de continuar
en un viaje sin retorno a lo desconocido,
un lugar al que pueda llamar hogar.

Luego de una noche fría sin luna,
en la que la oscuridad tomó el control,
mi alma se a perdido confundida
con sufrimiento, pena y desesperación.

Pienso en todo lo que he pasado
todo lo que he dejado atrás,
vivencias y experiencias entrecruzadas
algunas que añoro y otras que quiero olvidar.

Esperanzado por el porvenir
continuo por el camino que ya he recorrido,
agradecido por un nuevo día,
ansioso por explorar lo que me falta vivir.

No sé con qué me encontraré en este día
tan solo espero poderlo entender
atesorando el momento, una nueva experiencia,
el crisol que energiza la luz de mi ser.